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Sesión 5: El Espíritu Santo: Consolador, Ayudador, Intercesor y Sello
Objetivo: Enseñar a tu hijo/a sobre los roles del Espíritu Santo como Consolador, Ayudador, Intercesor y Sello, y cómo Él provee consuelo, guía, ayuda en la oración y seguridad de nuestra salvación.
Guía de lecciones – Sesión 5: El Espíritu Santo: Consolador, Ayudador, Intercesor y Sello
Consolador: Explica que el Espíritu Santo nos consuela en tiempos de dificultad, proporcionándonos paz y seguridad. Lean juntos Juan 14:16-17. Discute cómo el Espíritu Santo nos consuela cuando estamos tristes o asustados.
Habla sobre alguna vez que tu hijo/a se haya sentido asustado/a, como al visitar al médico o al tener miedo por la noche, pero haber tenido a un padre, madre o amigo/a con ellos fue un gran consuelo. Reflexiona sobre cómo las personas no siempre pueden estar con nosotros, pero el Espíritu Santo sí puede, haciéndolo el consolador supremo. Menciona que podemos encontrar consuelo en Él porque es Dios, por lo tanto, nada es demasiado difícil para Él. Él nos ama y tiene un plan perfecto para nuestras vidas.
Ayudador: Discute cómo el Espíritu Santo nos ayuda en nuestra vida diaria, proporcionándonos orientación y fuerza. Lean juntos Juan 14:26-27. Explica que el Espíritu Santo nos ayuda a entender qué hacer, nos da fuerza para hacer lo correcto y nos guía para tomar buenas decisiones.
Organiza actividades de trabajo en pareja como ordenar cartas, armar un rompecabezas o mover un objeto. Habla sobre cómo las cosas son más fáciles con un ayudador y cómo algunas cosas que serían imposibles hacer solos se vuelven posibles con ayuda. Luego, relaciona esto con el Espíritu Santo siendo nuestro Ayudador.
Habla sobre diferentes situaciones en las que podríamos necesitar ayuda y cómo el Espíritu Santo puede brindar esa ayuda.
Intercesor: Explica que el Espíritu Santo nos ayuda a orar, intercediendo por nosotros cuando no sabemos qué decir. Lean juntos Romanos 8:26. Discute cómo a veces no sabemos cómo orar o qué decir, pero el Espíritu Santo ora por nosotros y nos ayuda a comunicarnos con Dios.
Pide a tu hijo/a que intente describir un objeto en una tarjeta sin usar ciertas palabras. Explica que a veces cuando intentamos orar, puede ser así —no sabemos exactamente qué palabras decir o por qué cosas orar. El Espíritu Santo nos ayuda con nuestras oraciones, incluso cuando no sabemos exactamente qué pedir.
Sello: Explica que el Espíritu Santo también es nuestro Sello, lo que significa que garantiza nuestra salvación y nos marca como pertenecientes a Dios. Lean juntos Efesios 1:13-14. Discute cómo un sello se usa para mostrar propiedad y autenticidad, como un sello en una carta o un logo en un producto. El Espíritu Santo es la marca de Dios en nosotros, mostrando que le pertenecemos y que Él cumplirá sus promesas hacia nosotros.
Crea un sello con cera. Derrite un poco de cera para sellar y usa un sello para crear una impresión en un pedazo de papel. Muestra cómo se usaba un sello en tiempos históricos para mostrar propiedad y autenticidad. Explica que el sello del Espíritu Santo en nosotros muestra que pertenecemos a Dios.
Organiza una búsqueda del tesoro para buscar logos que muestren propiedad. Pide a tu hijo/a que busque diferentes logos en productos que indiquen quién los fabricó. Discute cómo estos logos son similares al Espíritu Santo siendo nuestro Sello, mostrando que pertenecemos a Dios.