El Tabernáculo - lección de la biblia para niños

Esta semana exploraremos la construcción del tabernáculo. Los pasajes que cubren la construcción del tabernáculo que se encuentran en Éxodo 25: 1 a 31: 18 y Éxodo 35: 4 a 40: 38. Puede elegir entrar en más detalles con su hijo, pero nos centraremos en los puntos principales de:

Dios quiere morar entre su pueblo.
Dios quiere que usemos los dones que nos ha dado.
Debemos ofrecer lo que podamos a Dios.

Guía de la lección

Pregúntele al niño si recuerda lo que recibió Moisés en el Monte Sinaí. Explique que Dios le dio a Moisés planes para el tabernáculo.

Pregúntele al niño si sabe qué es un plan. Explique qué podemos hacer planes verbales como qué comer para el almuerzo. Señale que también podemos hacer planes dibujados para seguir cuando construimos algo. Elija algo simple para hacer con su hijo. Hay muchos planes de manualidades disponibles en Internet. Muéstrele a su hijo los pasos del plan mientras lo hace. Señale que para crear el artículo que está intentando hacer; debe seguir los pasos tal como se presentan. Dígale al niño que Dios tenía pasos muy específicos a seguir para convertirlo en su casa.

Explique al niño que el pueblo de Israel hizo ofrendas a Dios. Piense en algunas formas en que puedes ofrecer algo a Dios. Puede usar esto como una forma de enseñarle al niño sobre diezmos y ofrendas. Señale que podemos ofrecer otras cosas además de dinero a Dios, como los israelitas que donaron su tiempo. Elija a una persona que está pasando por un mal momento con la salud u otra prueba. Explique al niño que donará su tiempo para ayudar a esta persona. Intente seleccionar una tarea que le interese a su hijo. Si les gusta dibujar, cree una tarjeta para una persona enferma. Ofrezca hacer una tarea simple para la persona, como lavar su automóvil. Puede ayudar a su hijo a hornear un dulce si es ahí donde radica su talento / interés. Cualquiera sea la tarea que seleccione, asegúrese de permitir que el niño trabaje y sienta la sensación de logro. Ore antes de comenzar a decirle a Dios que ésta es una ofrenda para Él. Agradezca al Señor cuando termine que Él le dio la habilidad de hacerle esta ofrenda.

Lea 1 Corintios 3:16. Dígale al niño que ya no necesitamos construir un tabernáculo para Dios, ya que Él vive en los corazones de los creyentes. Recuérdele al niño los pasos que los israelitas debían tomar para construir la casa de Dios. Señale que podemos hacer de nuestros corazones la morada de Dios arrepintiéndonos y confiando en Jesús para salvarnos de nuestros pecados. Lea Efesios 3:17.